Columnas
Covid-19: Fin Plan Fronteras Protegidas
El ministerio de Salud decretó el fin de de las medidas del Plan Fronteras Protegidas, lo que implica eliminar una serie de requisitos administrativos de entrada al país. No significa que el virus haya desaparecido y conviene reflexionar sobre lo que deja el fin de la alerta internacional.
Por: Felipe Maldonado Pereira*
Transcurrieron más de tres años para que la OMS decretara el fin de la alerta sanitaria internacional por la pandemia del Covid-19. En Chile, por primera vez, en mayo, no hubo muertos por este virus y hace unos días el ministerio de Salud decretó el fin de de las medidas del Plan Fronteras Protegidas, lo que implica eliminar una serie de requisitos administrativos de entrada al país. No significa que el virus haya desaparecido y conviene reflexionar sobre lo que deja el fin de la alerta internacional.
Habrá, sin embargo, que esperar otras nuevas resoluciones por parte del gobierno y pronunciamientos de la autoridad administrativa, y evaluar cómo estas impactarán las adecuaciones de las normas y las políticas internas de las empresas. Entre los aspectos pendientes de revisión están los ciclos de vacunación, los requisitos actuales referidos a usos de elementos de protección personal, las modificaciones a reglamentos internos, de orden higiene y seguridad, entre otros. Por ahora, quienes crean que quedaron atrás las medidas de seguridad que las empresas y los trabajadores adoptaron en la pandemia, están equivocados. Será difícil borrar las medidas implementadas todos estos años de plano, dado los avances que, en realidad, éstas supusieron y cómo fueron, en simultáneo o posteriormente, implementados en los distintos
instrumentos laborales.
Si bien la memoria suele ser frágil, es clave, no obstante, destacar los aspectos positivos de medidas que pudieron implementarse gracias al empujón provocado por el Covid-19. Seguramente, ante una próxima pandemia o endemia, las empresas reaccionarán de manera más rápida, para que esta no impacte sobre el desarrollo normal de sus industrias. Un ejemplo es lo que ocurrió tras la adopción del teletrabajo en nuestro ordenamiento laboral, pues ya se tendrá claro qué nivel de flexibilidad laboral pudiese ponerse en marcha y cómo hacerlo en la práctica. Así, también recordaremos el caso de las empresas de prestación de servicios en las que se estableció el teletrabajo. O las adecuaciones de contratos de trabajo, que también involucraron a las industrias productivas, por cuanto muchas tuvieron que implementar sistemas excepcionales de trabajo para garantizar la continuidad operacional de las empresas, mientras se aseguraba la salud y la vida de las personas.
Por lo demás, tratándose de una materia sensible, como es la salud, las mutuales y la Dirección del Trabajo seguirán fiscalizando que las medidas inicialmente sólo epidemiológicas se sigan manteniendo.
Se desconoce todavía cómo y cuáles de todas medidas adoptadas durante la pandemia continuarán siendo relevantes en el futuro. Quizás sólo el tiempo tendrá estas respuestas, pero podemos reinterpretar todo lo pasado en relación con las numerosas lecciones que dejó la pandemia del Covid-19, incluso mejorando los modelos de medidas sanitarias ya adoptadas. Más allá de todo lo escrito, clave será la responsabilidad y compromiso en el actuar, tanto de las autoridades, empresas y trabajadores para, en definitiva, el mayor bienestar y salud de trabajadores y de la población toda.
*Felipe Maldonado Pereira, Abogado, Parga Montes Vasseur Laborales