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El valor estratégico de las herramientas «OSINT» para la abogacía contemporánea

Por León Lanis*

En la actualidad, la información accionable es uno de los activos más preciados y escasos, especialmente en el mercado de los abogados. La capacidad de encontrar, estructurar, analizar críticamente y accionar información ya deja de ser un mero soft-skill deseable para un abogado, sino que es una habilidad increíblemente esencial en todas las ramas de nuestra profesión.

León Lanis Ventura

OSINT es el acrónimo para Open-Source Intelligence o Inteligencia de Fuentes Abiertas. Podemos definirlo como el conjunto de procedimientos, técnicas y principios destinados a la recolección, análisis y aprovechamiento de información obtenida desde fuentes abiertas.

En palabras más simples, es la disciplina que organiza encontrar y usar información disponible públicamente para un determinado objetivo.

No toda información es útil. Es, por tanto, necesario realizar un “proceso discriminatorio” de información, que permite mejorar su utilidad en una operación. En primer lugar, tenemos data cruda, es decir, datos que no tienen estructura y meramente reflejan una realidad; cuando esa data la esquematizamos, pasa a ser información, ya que ahora tiene una estructura lógica, responde preguntas básicas y tiene un sentido; luego, al discernir sobre su finalidad, destino y utilidad, la información pasa a ser inteligencia, es decir, información accionable.

A modo de ejemplo: una lista de sociedades es data, al ordenarlas por fecha, socios, etc, pasa a ser información, si relaciono a sus socios con litigios, y si esa relación permite detectar conflictos de interés, eso es inteligencia.

Décadas anteriores, esta disciplina se reservaba para agencias de inteligencia, ya que sus principios y técnicas eran muy útiles para encontrar información de enemigos. Pero hoy en día, es una práctica generalizada para muchos mercados.

Definitivamente, los elementos que después describiremos tienen muchas aristas que permiten a los abogados entregar información a sus clientes de manera más eficiente y completa, ya que estructura la forma en cómo podemos investigar un determinado sujeto o empresa. Diversos reportes de firmas de inteligencia corporativa en EE.UU y U.K muestran consistentemente que el uso de OSINT en M&A, litigación y due diligence permite detectar riesgos que no aparecen en procesos tradicionales.

Dicho esto, es importante destacar los principios rectores que debiesen regir toda investigación, ya que ellos son esenciales para realizar una investigación profesional y útil. Algunos de ellos son:

  1. Ética y Legalidad: Estos dos elementos debiesen ser una discriminación inicial. Con OSINT es muy fácil encontrar información personal y sensible, por tanto es importante primero conocer la legalidad de la operación, pero además siempre tener un enfoque ético. Aún si una búsqueda es legalmente válida, puede que nos encontremos con un área gris en la ética profesional.
  2. Finalidad: ¿Para qué me sirve esta información? Esa pregunta nos permite esgrimir si la investigación tiene un objetivo claro y si lo recolectado cumple con una hipótesis investigativa.
  3. Validación: Siempre se debe validar, con al menos dos fuentes, que la información que recolecté es real. Los rumores no sustanciados y la información no validada es inútil para una investigación.
  4. Minimización: ¿Quiere mi cliente tanta información? Es bastante útil saber ser conciso con lo que se busca y poder precisar lo encontrado.
  5. Contextualización: Toda información debe estar acompañada de los elementos y eventos que la circundan.

En toda investigación la planificación es siempre uno de los elementos esenciales y el mayor predictor de éxito. Si busco por todos lados sin tener claro qué, porqué y cómo, la tarea se termina dificultando más de lo necesario. Como decía Benjamin Franklin “Fallar en planear es planear para fallar”.

La planificación se puede dividir en tres elementos:

  1. Hipótesis: La hipótesis es quizás lo más importante en toda investigación. Con ello establecemos los lineamientos de búsqueda y ajustamos todo el procedimiento a objetivos claros. Es, por así decir, el marco normativo que guiará la selección de fuentes, técnicas de búsqueda y los criterios de validación. Algunas preguntas que se debieran hacer en este paso son:
    1. ¿Qué quiere el cliente saber?
    2. ¿Cómo puedo encontrar esta información?
    3. ¿Quién o qué es mi target?
    4. ¿Qué preguntas quiero resolver?
  2. Planificación de riesgos: Toda investigación deja trazos. Uno siempre debe asumir que dónde y cómo buscó puede generar riesgos tanto al investigador como al cliente por quién investigo. Aquí es donde un buen investigador aplica lo conocido como OPSEC, o seguridad operacional. Lo esencial es reconocer la sensibilidad de la información que se está buscando, las herramientas que quiero usar y sobre todo las consecuencias que pueden dejar una investigación.
  3. Decisiones: Resolviendo todas las ecuaciones anteriores, es importante tomar una decisión y aplicarla. Es muy contraproducente en una investigación tener hipótesis y planificación pero que no se concrete en una decisión, técnica o forma investigativa.

Dicho todo lo anterior, y una vez tomada la decisión de cómo y qué se va a investigar, es igualmente importante tener repositorios de herramientas que sean útiles y que permitan acceder a la mayor cantidad de información con el menor esfuerzo posible.

Cada herramienta tiene una finalidad distinta, por lo que si me pusiera a listar cada una de ellas, podríamos escribir varios libros. Lo importante de las herramientas es siempre verificar los hallazgos y usar motores de búsqueda lo más confiables posible. Sin saberlo, en la profesión legal solemos usar muchas herramientas “OSINT” que dan un retorno de información gigantesco. Desde los Conservadores hasta el Registro Civil, Chile cuenta con cientos de instituciones que entregan información de manera muy accesible, solo requiere saber dónde y cómo buscar.

Un repositorio que uso bastante es osintframework.com/ es cuál sirve especialmente para investigaciones internacionales. Aquí podrán encontrar desde motores de búsquedas de personas hasta listas de financiamiento ilícito. Otras herramientas, más útiles para Chile, son por ejemplo dequienes.cl, la cuál es sumamente útil para búsquedas corporativas. Recomiendo mucho darse el tiempo de buscar las distintas herramientas y ver cuál logra resolver mejor sus hipótesis investigativas.

En conclusión, en un mundo cada vez más conectado y digital, es importante que los abogados encontremos formas de actualizar nuestras habilidades con el uso de herramientas de búsqueda de información eficientes y profesionales. La disciplina del OSINT se ha posicionado como un elemento clave para esta profesión, ya que permite recolectar, analizar y aprovechar de mejor manera la información para después convertirse en consejos útiles para la toma de decisiones de un cliente.


*León Lanis, Asociado en Harris Gómez Group (HGG). Especialista en materias de Derecho y Nuevas Tecnologías. Diplomado en International Finance Regulation en Harvard Law School.

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