Plataformas inteligentes facilitarán el cumplimiento de la Ley de Ciberseguridad

La Ley Marco de Ciberseguridad (Ley 21.663), en implementación durante 2025, está en transformando la manera en que las empresas y organizaciones gestionan la protección de sus datos y sistemas digitales. La normativa establece estándares obligatorios de seguridad, exige reportes continuos a la Agencia Nacional de Ciberseguridad (ANCI) y demanda planes de continuidad operativa, auditorías, y mecanismos de trazabilidad para demostrar el cumplimiento permanente.

En este nuevo escenario, las plataformas de automatización se proyectan como una herramienta decisiva para las organizaciones que deberán enfrentar un volumen creciente de tareas normativas y técnicas. El monitoreo continuo de redes, la gestión de incidentes, la generación de alertas y la elaboración de reportes periódicos son procesos que, hasta ahora, dependían en gran medida del trabajo manual y de la intervención humana.

Una de las compañías que ha tomado la delantera en este ámbito es Despapeliza, empresa chilena especializada en automatización inteligente de procesos documentales, con presencia en Estados Unidos y distintos países de Latinoamérica, y más de cien clientes activos en sectores regulados. Su plataforma Legale.io que cumple con estándares ISO 27001, integra analítica de variables de gestión asociadas al riesgo, control de versiones y trazabilidad automatizada, permitiendo a las empresas demostrar su cumplimiento normativo en tiempo real, un requisito esencial para adaptarse al nuevo marco regulatorio.

“Las herramientas de automatización representan un recurso crucial para que organizaciones y empresas puedan implementar eficazmente la Ley Marco de Ciberseguridad, dada la complejidad y el volumen de las obligaciones contempladas en la normativa”, explica Rodrigo Mortara, CEO de Despapeliza. Entre sus atributos, el ejecutivo resalta la posibilidad de automatizar la  gestión de la vigilancia de redes, la identificación de vulnerabilidades, el registro de incidentes y la generación de alertas tempranas asociadas a documentación crítica, facilitando la prevención y la respuesta rápida ante eventos que comprometan la seguridad de la información”.

Mortara agrega que la automatización también estandariza procesos de cumplimiento, reduce la carga operativa y minimiza los errores humanos, todo mientras optimiza los recursos disponibles. “De esta manera —añade—, las soluciones automatizadas fortalecen la resiliencia, la transparencia y la capacidad de adaptación de las empresas frente a los desafíos tecnológicos y regulatorios que impone la nueva legislación”.

Más que una ventaja competitiva

El primer gran cambio de la ley es el fortalecimiento de la “ciberresiliencia” nacional. Las empresas catalogadas como operadores de importancia vital, por su rol en servicios esenciales (energía, salud, transporte o finanzas), deberán implementar medidas de seguridad continuas, reportar incidentes en plazos breves y mantener planes de recuperación ante desastres. En ese contexto, las herramientas digitales con registro automático y trazabilidad completa serán fundamentales para cumplir los tiempos y requisitos de la autoridad.

El segundo foco está en la creación de un marco institucional y normativo robusto, liderado por la ANCI. Este organismo no solo fiscalizará el cumplimiento, sino que también impulsará la coordinación público-privada y la adopción de estándares internacionales como ISO 27001 o NIST. La interoperabilidad y la estandarización documental se convertirán en claves para evitar sanciones y demostrar auditorías exitosas.

El tercer foco es la adaptación de las empresas al nuevo modelo de cumplimiento continuo, que implica inversión tecnológica, cultura organizacional y talento especializado. Aquí, la automatización emerge como un aliado transversal: facilita el cumplimiento técnico, acelera los reportes a la ANCI y asegura una trazabilidad que sería imposible mantener manualmente.

La nueva legislación no solo redefine la responsabilidad de las organizaciones frente a la ciberseguridad, sino también cómo deben demostrarla, concluye Mortara, destacando que, con la normativa, Chile da un paso hacia una gestión digital más segura, trazable y eficiente. “La adopción de plataformas de automatización documental como Legale.io, permitirá transformar el cumplimiento normativo en un proceso continuo, inteligente y verificable, elevando los estándares de seguridad y confianza digital del país. La automatización dejará de ser una ventaja competitiva para convertirse en una condición necesaria para operar”.